Tartufo (1664) es una de las obras capitales de uno de los más grandes comediantes de todos los tiempos. En ella, Moliere pone en su mira la hipocresía de la aristocracia y la burguesía de su tiempo. No sólo el personaje que da título a la obra es caricaturizado por su falsa devoción sino también los otros pues, lejos de ser meras víctimas de los manejos del protagonista, también proclaman virtudes que son incapaces de sostener en la intimidad de sus propias vidas.
Traducción de Julio Ardiles Gray
Versión de Roberto Cossa
Jean-Baptiste Poquelin (1622-1673), más conocido por su seudónimo teatral Moliere, fue el más grande comediante francés de todos los tiempos. Actor y director de muchas de sus obras, renovó el teatro de su época a través de la incorporación de elementos de la Commedia dell’arte italiana y de giros y costumbres de las clases populares. Entre sus obras, deben mencionarse Las preciosas ridículas (1659), La escuela de las mujeres (1662), Don Juan (1665), El avaro (1668) y El enfermo imaginario (1673).