En los ocho vodeviles y humoradas que presentamos, se ponen de relieve la maestría de Chéjov dramaturgo y sus aspiraciones innovadoras.
Traducción, prólogo y notas de Alejandro Ariel González
Por su estilo, por su mirada y por el contenido de sus obras, Antón Chéjov (1860-1904) ocupa un lugar particularísimo dentro de la gran tradición rusa del siglo XIX; con él se cierra ese gran período que haría célebres a las letras de su país. En la segunda mitad de los años 80, Chéjov escribió una serie de vodeviles, o más bien, comedias de un acto que, tanto por su contenido ideológico como por el carácter de su comicidad, se asemejan a sus cuentos humorísticos.